lunes, 29 de septiembre de 2014

El amor visto de Platón

Y entonces, cuando leí, comprendí que es el amor:

 -Siendo, pues, hijo del Éxito y de la Indigencia, el destino que cupo en suerte al Amor fue el siguiente: en primer lugar, es eternamente indigente y dista mucho de ser delicado y bello como piensa la gente, antes al contrario, es rudo y anda escuálido, descalzo y sin hogar; duerme siempre en el suelo, sin mas, al sereno junto a puertas y en caminos y como herencia natural de su madre, vive eternamente en la necesidad. Por parte de su padre es valeroso, echado adelante y fuerte, cazador experto, maquinador constante de argucias, apasionado del saber y rico en recursos, entregado al filosofar de por vida, embaucador experto, brujo y sofista. No es por naturaleza ni inmortal ni mortal: más bien, en el plazo de un solo día, en un momento florece y vive y en otro momento muere para revivir de nuevo si logra el éxito como corresponde a la naturaleza de su padre. CUANDO LE SONRÍE EL ÉXITO, SUS RECURSOS SE LE ESCAPAN SIN DARSE CUENTA DE MODO QUE EL AMOR NUNCA ESTÁ DEL TODO NI EN LA INDIGENCIA NI EN LA ABUNDANCIA.

Platón